Cómo hacer churros caseros

• En un bol, echamos la harina, la sal y el bicarbonato. Reservamos.

Para hacer los churros de chocolate solo debes añadir el cacao en polvo junto con los demás ingredientes secos en este paso

• Llevamos el agua a ebullición.

• Cuando el agua hierva la añadimos a los ingredientes secos, que teníamos reservados en el bol, junto con el extracto de vainilla y el aceite. Integramos todo hasta que nos quede una masa homogénea.

• Cargamos la churrera con nuestra masa intentando que la masa quede compacta, sin burbujas de aire. Cuidado, estará caliente.

La churrera viene con distintos modelos de boquillas, aunque para hacer churros la más utilizada es la boquilla de estrella

• Ponemos a calentar abundante aceite de oliva en una sartén.

• Para freír los churros de forma fácil, puedes hacerlos sobre papel de hornear y después recortarlos e ir echándolos al aceite caliente. No temas por el papel, no se quema ni arde, y se desprende del churro al contacto con el aceite. Solo deberás retirarlo de la sartén con unas pinzas, porque eso si, quema.

Si tienes mucha maña con la churrera, puedes echarlos directamente al aceite caliente. ¡Como prefieras! ;-)

• Procura que el aceite esté a una temperatura constante, a unos 180º-190º C. Si el aceite está demasiado caliente los churros podrían quemarse por fuera y quedar crudos por dentro, si el aceite estuviera demasiado frío absorberían demasiado aceite y quedarían blandos. Cuando los veas doraditos, estarán listos.

Para medir la temperatura del aceite puedes utilizar un termómetro de cocina

• Deja los churros sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Ahora te toca a ti buscarles un acompañamiento…¿Un chocolate a la taza? ¿Rebozados en azúcar, quizás? Estarán buenísimos de cualquier forma ;-)

¿Ves que fácil? ya puedes disfrutar de unos churros caseros cada vez que te apetezcan :)


Abrazos,
Ana Cristina.